Los Ojos del Mal (2006)

Los Ojos del Mal (2006)

Los Ojos del Mal (2006)

Tuve la oportunidad de asistir en su momento al pre-estreno de la película. La verdad es que no sabía nada de ella, buena o mala, me daba igual, por que como mínimo, había sido gratis. No me esperaba mucho la verdad, pues cumplía con la misma estructura que muchas otras pelis del género, pero me llevé una sorpresa, y nos encantó! Hacía tiempo que no disfrutaba tanto con un asesino tan despiadado!

La verdad es que esta película debe mucho a su asesino, y no sería la misma sin: Glen Jacobs alias Kane, luchador profesional de lucha libre americana, de nada más y nada menos que 2.13m de altura y 148kg de puros músculos. Este hombretón además tiene la frikada de haber nacido en la base militar de Torrejón de Ardoz, Madrid. No es de extrañar entonces que en los créditos iniciales de la película veamos el sello WWWE Films, o lo que es lo mismo: World Wrestling Entertaintment, aunque sinceramente, tampoco me imagino a lo de la WWWE poniendo esta peli a sus más jovencillos seguidores, a menos que no quieran causarles traumas infantiles de por vida.

El comienzo de Los Ojos Del Mal (Dir: Gregory Dark, 2006 – See No Evil) es brutal! En menos de 3 minutos de película descubrimos un poli muerto (destrozado a hachazos) y 2 mutilados (el otro poli se queda sin brazo y una chica tatuada y retenida sin ojos), todo ello con un impacto y violencia, que rápidamente nos engancha, y nos hace empezar a descargar adrenalina. Además, ya vemos por donde van a ir los tiros, y nos enseñan que es un asesino traumatizado y obsesionado con la religión…. si es que todo fanatismo es malo! Raus, raus! Nuestro asesino en serie tenía la friolera cantidad de 17 cadáveres en su jardín, todos ellos sin ojos! Blind Death!

Después de esta primera toma de contacto, nos trasladan 4 años después del asesino de los ojos, y es para mí, cuando empieza la típica película de terror, llena de topicazos y personajes vacíos, el típico grupo de jóvenes delincuentes (4 chicos y 4 chicas) con sendos responsables, Williams (Steven Vidler), es decir el policía manco y Hannah (Tiffany Lamb), responsable de las chicas malas; los conducen al viejo y destartalado Hotel Blackwell. No obstante, luego me llevé una sorpresa, puesto que como veréis, no se queda en la tópica peli de terror con grupo de adolescentes!

A este grupo de lo más variopinto se le da la oportunidad de hacer un trabajo social (limpieza del hotel) a cambio de la reducción de la condena, evidentemente, estos jovencillos son obligados a ir, y les gustaría más estar pegándose una buena juerga de sexo, alcohol y drogas, que otra cosa. Como supervisora del lugar, encontramos a la dulce Sra. Margaret (Cecil Polson), que según ella es Restauradora de monumentos históricos! Mujer, si las que merecen una restauración a fondo son las 4 chicas! Jajajajjajaja… Parece ser que ahora el inmueble está abandonado y dejado de la mano de Dios, tras un incendio que afectó las plantas superiores, y sus actuales inquilinos son los vagabundos y homless que lo aprovechan de refugio!

A partir de ahí, los delincuentes se van repartiendo para el edificio, momento que aprovecha Jacob Goodnight (Kane) para espiarlos y perseguirlos, momentos que se aprovechan para ir introduciendo flaskbacks de Jacob, donde vemos a un chaval torturado y traumatizado por culpa de una madre ultra-fanática del cristianismo (siempre que veo un personaje así, me viene en mente a Margaret White (Piper Laurie), la madre de nuestra archiconocida, Carrie). La madre inculcará a Jacob la fe cristiana a base de palos, torturas y vejaciones, convirtiéndole en la mano justiciera de Dios, como dice en la película!

Como ya he dicho anteriormente, en esta peli lo de menos son los personajes encarnados por los chicos/as delincuentes, y el potencial de la película reside en la violencia y sadismo, con los que Jacob nos va regalando un asesinato tras otro. Es decir, los personajes pueden estar vacíos en sí, por que lo importante, es la muerte que reciben, convirtiéndose esos momentos, en adrenalina en estado puro. Vemos un descomunal y brutal Kane, que además de ser en sí mismo, un coloso, a la hora de tratar con sus futuras víctimas no tiene ningún tipo de ética, moral ni miramiento. Así pues, podemos contemplar como utiliza un gancho atado a una cadena, para llevarse víctimas; como golpea a otra contra el techo de un ascensor, dejándose la mitad del cerebro pegado en el mismo; como los zarandea mientras los transporta contra paredes y puertas; como les arranca los ojos; como asfixia a una chica haciéndole tragar el móvil; como los deja caer por un patio de luces o como los aplasta! Algunos pensarán que todo esto es completamente innecesario y es violencia gratuita, pues no, no es gratuita, más bien, es justificada, por que si no, la película, sí que sería un aburrimiento y una estupidez. Pero gracias a toda esta violencia, sangre y ojos, la película nos presenta a un asesino en serie, como hacía tiempo que no se veía uno! Cruel, despiadado y capaz de acojonar al más valiente de los espectadores, a menos que no seas otro wrestler a lo Mickey Rourke de igual tamaño que Glen Jacobs, el Diablo Rojo!

Sólo quiero destacar dos puntos débiles para mí de la peli: uno es horrible e innecesario, y es que Jacob no habla en toda la película, pero cuando lo hace es para cagarla, momento totalmente prescindible. Y otro momento también poco creíble, es cuando Jacob recibe un impacto en la cabeza, le empiezan a salir gusanos de la misma, debido a un impacto de bala, en su primer intento de detención, el poli amputado! Esto no se lo cree nadie, puesto que si tuviéramos tal cantidad de gusanos, tendríamos una necrosis y una gangrena cerebral de 3 pares de cojones, que nos impedirían llevar a cabo, las tan espectaculares muertes que Jacob nos muestra.

Ah! Y no os olvidéis mis corderitos, abrid los ojos, y lavaos los pecados, por que los ojos son las ventanas del alma! Jajajajajajjaja

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